El Gobierno anunció que el Tesoro Nacional utilizará sus reservas para intervenir en el mercado de cambios y controlar el precio del dólar, poniendo fin a la libre flotación de la divisa por el momento.
Este repunte sorprende, ya que ocurre a pesar de que el Gobierno convalidó tasas de hasta el 65% efectivo anual en un intento por absorber $9 billones de pesos circulantes.
El mercado ajusta sus proyecciones para la segunda mitad del año, anticipando una devaluación gradual del dólar oficial. Si bien el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) proyecta un tipo de cambio de $1.300 a diciembre, los futuros en A3 ya estiran esa cifra a $1.356, reflejando una prima de riesgo asociada al calendario electoral y la eventual merma de divisas tras la cosecha gruesa.