ECONOMÍA

Gobierno minimiza déficit externo y niega devaluación tras cifras del INDEC

El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, justificó el reciente déficit de más de u$s5.000 millones en la balanza de bienes y servicios del primer trimestre de 2025, publicado por el INDEC, y descartó categóricamente la posibilidad de una devaluación. Según el funcionario, la salida de dólares se debe a la importación de bienes de capital y el crecimiento económico, y no a una señal de alarma.

El INDEC publicó el pasado miércoles los datos sobre la "Balanza de pagos, PII y deuda externa del primer trimestre de 2025", que marcaron un déficit en la balanza de bienes y servicios de u$s5.191 millones. De este total, u$s4.502 millones corresponden a un saldo negativo de la balanza comercial de servicios. Ante estos números, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, explicó que el Gobierno "sigue atentamente" la situación en las cuentas externas y negó que se vaya a aplicar una devaluación.

"Hay varios sectores de la economía que esperarían una acción del Gobierno para devaluar el peso, pero eso no va a pasar", sentenció el funcionario. Además, recordó que el libre cambio continuará rigiendo "dentro de las bandas" y que el Gobierno solo va a intervenir "en el piso o en el techo".

Los datos del INDEC y la postura oficial

El pasado miércoles, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) dio a conocer su informe de Balanza de Pagos, donde se registró un déficit récord histórico de u$s4.502 millones en la balanza comercial de servicios durante el primer trimestre de 2025.

Según el documento, este resultado se explicó principalmente por la suba de los déficits de viajes (u$s2.755 millones) y, en menor medida, transporte (u$s407 millones). Otros sectores que también mostraron déficits significativos fueron los servicios financieros (u$s550 millones), los empresariales (u$s445 millones) y los vinculados a telecomunicaciones, informática e información (u$s233 millones), reflejando una creciente demanda de servicios externos en áreas estratégicas como la economía digital y el sector corporativo.

En contrapartida, solo dos rubros registraron saldos positivos: los servicios de gobierno -principalmente gastos de embajadas y consulados- con un superávit de u$s105 millones, y los de construcción, que apenas alcanzaron u$s7 millones, un monto marginal frente al tamaño del déficit total.

Este deterioro en la balanza de servicios coincidió además con una caída del 2,4% interanual en el superávit de la balanza comercial de bienes, que se ubicó en u$s3.276 millones durante el trimestre. Como resultado, el saldo neto de la cuenta corriente fue negativo en u$s1.228 millones, marcando un giro en relación con el superávit de u$s1.519 millones registrado en el mismo período de 2024.

Sobre estos datos, Francos defendió la gestión del presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo. Afirmó que desde Casa Rosada "siguen atentamente" los números, aunque consideran que son parte de un "cambio importante de política" y no una señal de alarma sobre el modelo económico. "Primero, hay libertad de cambio. Dentro de las bandas, el dólar se mueve libremente", recordó el jefe de Gabinete.

Luego, profundizó: "También es cierto que Argentina estaba descapitalizada y una gran parte de esos dólares que salieron son para importar bienes de capital. Si tenemos una economía en crecimiento en orden de 6% comparativamente con el año anterior, claramente ese crecimiento demanda inversiones y las inversiones en bienes de capital son parte de esos dólares que han salido del país".

Así, Francos continuó con la lógica planteada por el Presidente y el secretario de Política Económica, José Luis Daza, quienes aseguraron que el déficit de cuenta corriente se debe a la "inversión" y el crecimiento de la economía.

Tras esto, el jefe de Gabinete también se refirió a los sectores que esperan una devaluación. "Hay varios sectores de la economía que esperarían una acción del Gobierno para devaluar el peso, pero eso no va a pasar", sentenció.

En este sentido, Francos recordó que el esquema actual es de "libre cambio que rige dentro de las bandas" y que el Gobierno solo intervendrá "en el piso o en el techo". Luego, concluyó: "Por más que haya sectores interesados, si existiera una devaluación volveríamos a la historia de siempre: se emitirían pesos y se terminaría otra vez en la cadena inflacionaria. El Gobierno no va a proceder de esa manera".

Esta nota habla de:
Más de Nacional