Dólar, inflación y elecciones: La Casa Rosada celebra avances, pero se enfrenta a presiones y riesgo político
Las últimas encuestas reflejan un panorama electoral ajustado en la provincia de Buenos Aires y los empresarios advierten sobre el riesgo político, que podría frenar las inversiones en el país.
Una intensa semana en la Casa Rosada estuvo marcada por la satisfacción del Gobierno ante varios logros. Celebraron el acuerdo con el PRO para las elecciones, que la suba del dólar no se haya trasladado significativamente a los precios y que se hayan acallado las diferencias internas en el "Triángulo de Hierro" del poder. Sin embargo, la calma no es total. El Gobierno enfrenta un duro revés en el Congreso, al que responsabiliza por la aprobación de proyectos que, según Javier Milei, afectan el equilibrio fiscal.
Calma en el dólar, pero riesgo político a largo plazo
La Casa Rosada y el mercado celebran la relativa estabilidad del dólar, que ha recuperado competitividad con relación al real brasileño y al dólar estadounidense. Se estima que el equipo económico tiene las herramientas necesarias para mantener la calma cambiaria hasta octubre, ya que las reservas de libre disponibilidad del Banco Central rondan los US$20.000 millones.
Sin embargo, en el ámbito empresarial se percibe inquietud. El principal problema que enfrenta el programa económico es el riesgo político. Un importante empresario, consultado por el Gobierno para invertir en corredores viales, respondió que el riesgo de que en un futuro el "populismo pueda volver a conducir la Argentina" y congelar las tarifas lo frena. La percepción es que la falta de mayorías legislativas propias del oficialismo y la posibilidad de que la oposición regrese al poder dificultan la repunte de las inversiones.
Inflación a la baja y elecciones peleadas
Los primeros datos de agosto indican que el impacto del aumento del 25% del dólar en los últimos cuatro meses fue mínimo sobre el proceso inflacionario. Las estimaciones privadas proyectan que la inflación del mes se ubicará entre 2% y 2,5%. Este limitado traslado a precios se explica por la estabilización del dólar, la política monetaria restrictiva, la mayor apertura comercial y la debilidad en los ingresos de la población.
En el plano electoral, la situación es más incierta. Las últimas encuestas sobre la provincia de Buenos Aires reflejan un panorama ajustado para el oficialismo. Algunas proyecciones muestran una elección pareja entre el frente de La Libertad Avanza y el PRO y el peronismo. Sin embargo, otras mediciones indican que el oficialismo podría perder en el conjunto de los votos. En este contexto, la Casa Rosada considera que el ausentismo y la nacionalización de la elección serán factores clave.